Judith Gerbaldo
Judith Gerbaldo
Democratizar la comunicación sigue siendo la tarea
A la hora de hablar de referentes en el campo del periodismo, de la comunicación popular y de la investigación, con una profunda mirada en lo social, el nombre de Judith Gerbaldo sobresale de inmediato. Comprometida desde siempre en su rol de comunicadora y formadora, es protagonista y puente. Luchadora, remadora, curiosa, inquieta, perseverante, talentosa y creativa. Una constructora que traza caminos con el ejemplo, desde los micrófonos, las cámaras, la escritura, las aulas y las artes.
- ¿Quién es Judith Gerbaldo?
- Creo que la respuesta es muy sencilla, soy una mujer trabajadora que desde siempre ha perseguido sueños y desafíos que la trascendían, que al mismo tiempo le permitían volar y asumirlos con la terquedad del izote . En mi vida me he planteado objetivos que para otras personas quizá no tienen relevancia, pero que han marcado mi identidad. Soy la primera generación universitaria de mi familia, trabajo desde muy chica.
Amo el trabajo que hago, creo en lo que digo y felizmente, tengo una familia hermosa, viajera/ errante, que es mi sostén existencial.
Me gusta reconocerme como distinta, como una rara especie de condición anfibia y mestiza
- Tu tarea en el campo de la comunicación popular es vasta, contanos de ese trayecto en tu vida profesional. ¿En qué momento se encuentra la comunicación popular en el país y en Córdoba en particular?
- Me haces hablar del siglo pasado! Jajaja En los 80, tras los años más oscuros de la dictadura y por el regreso de la democracia, Argentina era una fiesta. De búsquedas, de esclarecimiento, del reconocimiento de los derechos humanos como columna vertebral de la cultura política del país, el juicio a las juntas. En ese escenario las y los jóvenes estábamos ávidos de hacer, decir, participar en la "cosa pública". La realidad mediática de entonces era concentrada en escasos medios, manejados por monopolios y con escasas posibilidades de acceso.
En esa década, tan rica en el plano ideológico, en términos de recuperación y de creación, muchos nos dimos a la tarea de fundar nuestros medios, de pensarlos, de establecer las bases que definen la tipología de radios en las que nos estábamos involucrando. A estas alturas hay mucha bibliografía que habla de esos orígenes y los pasos que fuimos dando, para que las radios comunitarias y sus trabajadoras/es dejáramos de ser considerados "truchos". Radios libres, comunitarias, populares, alternativas, alterativas. Luego vendría la lucha por el reconocimiento legal, porque sabíamos que allí se fundaban las bases de sostenibilidad jurídica e institucional.
Soy parte de esa generación. A mediados de los 80 terminé mi carrera como licenciada, ya con dos hijos y uno tercero en camino. Mi compañero Mario Farías, andaba en las mismas.
Tiempo de construcción del propio terruño comunicacional como Radio Sur 90.1 FM (www.radiosur901.com.ar ), la primera emisora comunitaria de Córdoba, que nació el 10 de diciembre de 1988, pertenece a una organización social como el Centro de Comunicación Popular y Asesoramiento Legal (www.cecopal.org ) a la que me sumé un par de años después de su nacimiento, a la que sigo perteneciendo, así como nos quedamos donde se encuentra el amor.
Los 90 fueron años de trabajo y expansión. A mediados de la década tuve la oportunidad de trabajar con más de 5000 organizaciones populares de todo el país, revisando sus estrategias de comunicación y repensando modos de ir gestionándolas desde las bases. Con el raro privilegio, en el marco de un país diezmado por las políticas neoliberales de Carlos Menem, de recorrer todas las provincias para encontrarme con el país del interior y su dolor social, fabricas cerradas, trabajadores hambreados que encontraban esperanza nucleándose en espacios socio – comunitarios que son espacios de lucha desde las bases, organizaciones de las más variadas, que buscaban alternativas a la crisis.
En los 2000 vino el tiempo de seguir construyendo lecturas y consensos sociales en torno a la democratización de las comunicaciones, la ya famosa campaña por los 21 puntos por una radiodifusión democrática hasta llegar a la consolidación de la Ley de Servicios de comunicación Audiovisual 26.522. Por supuesto que estas acciones nunca se hacen en soledad. Se fueron construyendo espacios, a nivel radiofónico FARCO, la Red Nacional de radios comunitarias y la Coalición por una Comunicación Democrática, que nucleó en su seno a todos los sectores de la comunicación. Fue una década hablada, contada y militada.
En paralelo, desde 2004 postulé en la Asociación Latinoamericana de Educación y Comunicación Popular (ALER), instancia continental organizada en una red de emisoras de radios comunitarias, populares coordinadoras de radio y centros de producción presente en la mayoría de los países de América Latina y el Caribe (www.aler.org ) para ser parte de su equipo de Formadores. Espacio que integré orgánicamente hasta 2016 y me permitió viajar por toda América Latina, vivir en cada pueblo, en cada zona donde hubiera radios comunitarias y populares y luchas para aprender, revisar, recorrer y multiplicar. En esa misma etapa coordiné el Área de Formación de FARCO, el Foro Argentino de Radios Comunitarias (www.farco.org.ar ) Donde experimentamos con proyectos nacionales de trabajo y crecimiento con tantas compañeras y compañeros que creían y creen en otra comunicación para otro país.
Todo lo que cuento es un relato a vuelo de pájaro sintético de un tiempo profuso y enriquecedor. Que en términos personales me nutrieron y enseñaron tanto, casi como un doctorado desde las bases. Siempre en colectivo, siempre con otres, siempre expuesta a la diversidad, a las posibilidades de la organización popular y la construcción de un camino que se vio reflejado en la construcción colectiva de programas de radio, de videos, de libros, talleres, reuniones. Y el sueño de una ley construida desde la bases.
Por esos años y mas fuertemente desde el 2010 en adelante, vino el tiempo de sentar las bases de la vida adulta, jaja! Prepararse para lo que viene. Por eso el regreso a la universidad, pero ahora como docente, profundizar conocimientos, construir instancias laborales locales, mientras seguíamos luchando por la libertad de expresión y la democratización de las comunicaciones.
- ¿De qué manera enfrentas los nuevos desafíos docentes, considerando tu intensa actividad en la Facultad de Comunicación?
- Me encanta mi trabajo docente, acompañar la formación de jóvenes comunicadores en cantidades como solo la universidad pública provee. En este caso también, como se sabe, se trata de un trabajo colectivo, las cátedras son habitadas por grupos de docentes, docentes en formación, adscriptos, estudiantes que hacen ayudantías docentes y el enorme grupo de estudiantes. Todo es un gran desafío que nos exige organizarnos, definir pasos a seguir, acciones, clases, planes de trabajo y lo más importante: autoformación. Hay que seguir estudiando y formándose, para estar a la altura de las circunstancias. Hay que mantenerse actualizadxs y, en el caso de la radio y la producción de sonido, manejar toda la tecnología que está a disposición.
Todo esto lo asumo como un juego de crecimiento y creatividad, que me energiza.
- El espacio en Radio Nacional, tus experiencias en la radio popular, lo formativo, ¿La radio es el medio por excelencia para vos?
- En buena medida sí. Si bien hago de todo, estoy especializada en radio. Tanto a nivel de formación, como de práctica periodística. En la radio me siento como un pez en el agua. Es mi territorio. No me cansa, puedo seguir durante horas, y me encantan todas las áreas vinculadas a lo radiofónico.
También me exige mucho, por lo que notarás que mis días son largos. Prefiero leer, investigar y escribir de noche, a veces hasta largas horas de la madrugada, pero el día arranca temprano. El análisis político, el seguimiento de los temas del día, los años electorales son muy desafiantes. Pero si no hago lo que hago, o sea, destinarle tiempo a rastrear datos, temas y contactos, siento que no podría hablar con mediana autoridad. Creo que en parte, eso se nota en lo que hago, lo que digo o las preguntas que formulo.
Me preocupa la situación de lxs actores no lucrativos y subalternizados respecto a la regulación y la sostenibilidad del sistema mediático cooperativo, comunitario y alternativo en contextos de parcial desmantelamiento de la ley de servicios de comunicación audiovisual. Desde nuestra experiencia, ratifico la importancia de la Ley de medios audiovisuales, la necesidad de su restitución plena y su ampliación considerando aspectos no incluidos en la misma, y la necesidad de democratizar la pauta publicitaria para evitar la desigualdad en la asignación de recursos y promover la diversidad de voces.
Es tan delicada la situación actual que nos impulsa a seguir insistiendo con la necesidad de democratizar la comunicación. Más allá de la perspectiva política de lo que se viene, es necesario insistir en la vigencia plena de la ley de servicios de comunicación audiovisual, que se ratifique en todos sus términos, para lo cual es necesaria la derogación del decreto 267, que firmó Mauricio Macri a poco de asumir su presidencia.
Se debe seguir democratizando la comunicación tras un largo período de crecientes retrocesos e insistir en la asignación equitativa de la pauta publicitaria, fortaleciendo el rol del Estado en su tarea de promoción de la diversidad, la pluralidad de voces y la autogestión. Aplaudo la extensión de Ley de Asignaciones Específicas destinadas al sostenimiento de actividades como las de bibliotecas populares, el cine, la música y el teatro hasta el 31 de diciembre de 2072. Y la vigencia de los fondos previstos en el artículo 4 de la Ley 27.432 para el Instituto Nacional de la Música (INAMU), el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Instituto Nacional del Teatro (INT), la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) y el Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual (FOMECA).
En relación a la pauta publicitaria oficial, si bien ha habido algunos avances sigue siendo desproporcionadamente asignada a los 20 grupos mediáticos más importantes de la Argentina. Entonces, esos grupos se llevan la mayor porción de la torta y a los medios de gestión social les comparten migajas, por lo que sigue siendo una asignación totalmente desigual. Y si se compara la realidad entre distritos: es totalmente desproporcionada entre lo que se asigna a los medios de la Capital Federal y lo que se asigna a los medios del interior, con lo cual vuelve a aparecer la ya mencionada doble discriminación.
Otro aspecto vinculado a la sostenibilidad de los medios, está vinculado con el rol indelegable del Estado en términos de promover la pluralidad y la diversidad de voces, en el mantenimiento del FOMECA como política pública, fundamental en las estrategias de sostenibilidad y para garantizar la autogestión.
Finalmente, como trabajadora de Radio Nacional, y en vistas al ya descripto sombrío escenario que proyectan algunos candidatos con chance de acceder al poder, que están proponiendo la desaparición de los medios públicos, por lo cual, es importante ratificar una vez más su defensa. Importa la mirada sobre el rol de los medios públicos, no como algo abstracto que se maneja como un coto estatal cerrado, sino que planteen realmente capacidad de escucha sobre lo que la sociedad y sus organizaciones populares están requiriendo. Finalmente, decir que insisto en este tópico, por el rol estratégico de estos medios y por su aporte para constituir/construir la idea de nación, la idea de identidad que nos es propia en los rincones más alejados e inhóspitos de la patria. Tanto como la dignidad de sus trabajadores/as, en el respeto de sus derechos y salarios dignos.
- ¿Cómo nos ves a las mujeres periodistas en la actualidad? ¿Qué inserción mediática tenemos? ¿Debemos seguir luchando por los espacios?
- Muchacha, has recorrido un largo camino, creo que esa frase que se instaló con una publicidad hace ya tanto tiempo, de alguna manera nos define a todas las que estamos en esta tarea.
Se han dado notables avances tanto en el acceso a los medios como el paulatino reconocimiento de las destrezas y capacidades de las mujeres. Como resultado de las luchas del movimiento de mujeres y la marea verde del Ni Una Menos, tal reconocimiento se incorporó como parte del lenguaje "políticamente correcto", por algo se empieza!
Nuevas leyes y nuevas estrategias de deconstrucción han contribuído a modificaciones en ese escenario. Falta mucho todavía, pero ciertamente veo una enorme potencialidad en las jóvenes periodistas que van instalando su impronta.
Merece un destacado lo que pasó el 8 de junio de este año. A 2 años de su sanción el Estado reglamentó la Ley de Equidad en Medios de Comunicación que plantea la equidad en la representación de los géneros en los servicios de comunicación, obligatoria para el Estado y con incentivos para los privados que la adopten, a nivel federal y con participación de instituciones educativas y gremios. Eso es muy esperanzador. Sin embargo, como pasa en otros ámbitos y áreas, creo que no hay que bajar los brazos. Hay que seguir ampliando derechos y que se cumplan las normativas vigentes, como el cupo laboral trans, y todo aquello que le agregue democracia a la democracia.
- El arte ocupa también un lugar destacado para vos, ¿de qué forma?
- El arte nos alimenta el alma, nos nutre y nos hace crecer. No me alcanzan las horas del día para dedicarme con más afán. Cine, teatro, música, artes visuales, son pasiones cotidianas.
Me importan las políticas culturales y me interpelan en lo subjetivo y lo ideológico obras, puestas, performances. Desde hace unos años decidí formarme en artes visuales, teoría del color, andamentos y producciones en mosaico. Tengo varias obras en pequeño formato y varios murales, que vinculan arte, libertad de expresión, comunicación, derechos e identidad. Creo que esos son mis temas que vuelven a mi una y otra vez mientras ando ocupada haciendo otras cosas. Enfrentarme a una obra, cualquiera sea, me libera, me desconecto, te permite internarte en tu universo interior casi sin darte cuenta mientras vas viendo cómo avanzar con el proyecto creativo que te propusiste.
- ¿Qué debilidades y fortalezas encuentras en la comunicación cultural cordobesa?
- Creo que tenemos excelentes exponentes del periodismo cultural y Córdoba es una plaza que despliega magia en diversas formas. Por épocas asistimos a una profusa creación estética que se vio profundamente afectada por la pandemia. Pero a poco de andar nos llegaban a las pantallas las formas de la expresividad indetenible, eso fue fantástico, potente, no alcanzaban las palabras, los textos, los espacios para contarlo. Y ahí creo que radica unos de los problemas, no la falta de plumas, palabras o capacidad de producción de imágenes, sino la necesidad de ampliar espacios y que mediáticamente se le dé espacio a ese mundo enorme y diverso.
La revista que ustedes lanzaron siento que va en esa línea, Tierra Media emerge como esos movimientos tectónicos que encuentra las fuerzas que provienen del interior de la tierra y actúan construyendo y destruyendo las grandes formas de relieve. Pero que ustedes definen tan bonitamente como "una revista río dedicada a las artes y la cultura" Y en esa forma de auto reconocerse, ponen el acento en la autonomía, en el propio criterio, en lo independiente. Más de eso hace falta.
Sobre Judith Gerbaldo:
Magíster en Comunicación y Cultura Contemporánea (CEA-UNC) y Lic en Comunicación Social (FCC UNC). Es periodista, consultora e investigadora en comunicación, cultura, radio, comunicación popular y movimientos sociales. Productora de contenidos audiovisuales especializada en niños, niñas y adolescentes. Participa desde hace 34 años en Radio Sur 90.1 FM. Asesora en medios, infancia y juventud en diversas instituciones de la región latinoamericana y desde 2012 se desempeña como periodista en Radio Nacional Córdoba. Es docente del Taller de Producción Radiofónica II y Titular del Taller de Expresión Oral y Locución. Asimismo también es Responsable de la Secretaría de Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UNC. Integra FARCO – Foro Argentino de Radio Comunitarias- desde sus orígenes, y entre 2004 y 2014 fue su responsable de Formación. En el mismo período integró el Equipo de Formadores/as de ALER – Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica-. Es co – directora del proyecto de investigación Industrias culturales en la convergencia: Demandas populares, políticas, economía y derechos.
Participó como consultora en organizaciones nacionales e internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Foro Social Mundial, Jurado de Festivales nacionales e internacionales de radio y medios audiovisuales (Córdoba – Argentina-, Colombia, Brasil), desarrolló talleres formación y exposiciones en Argentina, Uruguay, Bolivia, Paraguay, Ecuador, Costa Rica, México, Colombia, Brasil, Chile, Cuba, y España, como en la mayoría de las provincias argentinas. En Twitter: @JudithGerbaldo
Algunas de sus producciones, click aquí
Comentarios:
- Mónica Ambort: FELICITACIONES chicas. A Jackie por la entrevista feminista y popular. Y a Judith, por todo su recorrido, digno de una gran revista como Tierra Media. Un abrazo a ambas.
- Griselda Gómez: Excelente entrevista a una periodista comprometida, de voz potente y largo trayecto.
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