Instant-Táneas

Adrián Savino

Desplaza las diapositivas

Cuando era chico, a mitad de camino entre mis abuelos y mis padres, estaban los Beatles.

Sucedía domingos a la tardecita, en el asiento de atrás de un R12 Break, yendo de Empalme al Cerro.

Unas ocho cuadras pasando el viaducto de la Ruta 9, después de atravesar el puente ferroviario que da fin a Maipú 2da y comienzo a la República de San Vicente.

En Corrientes y Galíndez, sobre un muro blanco, cuatro figuras alargadas en tamaño natural.

Los reconocía de inmediato: eran los Fab Four en su etapa de saco y flequillo.

No sabía gran cosa de ellos en aquel entonces, o sea, casi nada al lado de lo que sé hoy.

Que sería un poquito menos de lo que sabe el oftalmólogo Mostaza Sánchez, a quien hace poco en la tele lo vi hablar más de John, Paul, George & Ringo, que de ojos.

Cada vez que pasaba por allí, no me perdía de contemplar aquella aparición urbana.

Y unos años más tarde, con trece o catorce años, otra inscripción al paso se me hizo costumbre.

La veía los viernes por la tarde, en la cuadra de Rioja al 1100 si mal no recuerdo, mientras caminaba con Cabeza y Mohicano desde el Belgrano hasta el Correo para tomar juntos el 92.

Era un stencil de "Prohibido Fijar Avisos" en rojo, al que debajo, alguien le había puesto con aerosol negro: "Bueno.".

Bueno, y punto: textual.

Con Cabeza y otros amigos, más adelante, formamos una banda de rock cuyos sucesivos nombres salimos a graffitear un par de madrugadas.

Primero Ticket (new wave), y luego El Sonido Final (afterpunk).

Cabeza y Mohicano, hasta el día de hoy, son amantes de los long-plays.

Yo también pero no tengo dónde reproducirlos; por lo que mis vinilos están en las buenas manos de Cabeza.

Allá, en su casa de "Sanfran", está por ejemplo La La La, de Spinetta/Páez.

Con esa canción de Fito, "Instant-Táneas", y esa otra de Luis, "Todos estos años de gente".

Que hablan las dos de flashes urbanos: como los Beatles de San Vicente o el contraventor de Rioja.

Visiones que más adelante en el tiempo, celu en mano y casi sin querer, me puse a registrar y coleccionar.

Un Mickey frente a un inodoro abierto, diciendo: "La connncha de la lora Donald!!! Levantá la puta tapa!!!"

Dos nenes en un tobogán, preparando el lanzamiento de una cubierta desde lo más alto.

La compuerta trasera de un rastrojero, con cuatro placas de madera en las que figuran las letras F-L-E-T, y una E diminuta al pie de la T.

Y otras tres mil instantáneas hasta el día de hoy, surgidas más como si ellas buscaran el ojo que a la inversa.

¿Qué pensará de todo esto -me pregunto ya que estamos- el Dr. Mostaza Sánchez?...



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